Nos reunimos con el brillante y perspicaz Emilio Ruiz-calero Domínguez hace unas semanas y compartimos nuestra conversación a continuación.
Emilio, gracias por tomarte el tiempo de compartir tus historias con nosotros hoy. ¿Cuál ha sido el proyecto más significativo en el que has trabajado?
Cada proyecto en el que trabajo es significativo para el cliente, no hay ninguno en especial, son todos en sí mismos, cada persona que lleva uno de los trabajos que hago tiene un recuerdo de su infancia, un recuerdo de su adolescencia o un recuerdo significativo. Momento de su vida en el que los personajes que me tatúa me traen a ese momento.
Emilio, me encanta que compartas tus ideas con nosotros. Antes de hacerle más preguntas, ¿tal vez pueda tomarse un momento para presentarse a nuestros lectores que quizás se hayan perdido nuestras conversaciones anteriores?
Empecé a tatuar un poco por casualidad, la vida me llevó a este sector y me atrapó, estoy muy agradecido con mi amigo Iván, y con todo mi entorno porque me apoyaron mucho al principio.
El mundo del tatuaje es muy duro y muy bonito a la vez, conoces a mucha gente y estableces vínculos muy duraderos con amigos y compañeros.
Lo más difícil fue empezar, al principio te falta la técnica necesaria para llevar a cabo tus ideas exactamente, el punto más importante es la paciencia y saber dónde estás y qué proyectos puedes llevar a cabo.
Una vez que ya tienes una cartera de clientes todo empieza a fluir lentamente, por eso siempre digo, en el mundo del tatuaje lo más importante es la paciencia.
¿Crees que hay algo que a los no creativos les podría resultar difícil comprender acerca de tu trayectoria como creativo? ¿Quizás puedas arrojar algo de luz?
Creo que te resultará difícil entender por qué hago tatuajes de anime y no otras cosas.
En principio es porque es parte de mi pasión, mi hobby y hace más divertido mi trabajo, a la hora de hablar con los clientes, saber por qué se tatúan y cuál es su parte favorita del manga o anime.
¿Alguna vez has tenido que girar?
Cuando comencé estaba restaurando libros viejos y al mismo tiempo trabajaba en tiendas de ropa para poder costear la vida en general, pagar gastos, pagar el apartamento, trabajaba muchas horas en trabajos que no me daban un salario digno.
Luego decidí que tenía que dedicarme a algo más creativo, tenía amigos tatuadores que me apoyaron al principio y me explicaron parte del proceso de aprendizaje, pero tenía bastante miedo de lastimar a la gente (tranquilo, eso pasó con el tiempo jajaja ) Aprendí, puse todo mi foco en aprender a tatuar y hacerlo bien para dar el mejor resultado, finalmente ahora me dedico a esto de lleno, con mucha satisfacción y rodeado de gente increíble.
